jueves, 3 de octubre de 2013

@thebitterend_

Llevo un par de minutos escribiendo y borrando al instante todo lo que se me ocurre, y es que soy malísima para estas cosas. Me dijeron que teníamos que presentarnos y explicar un poco como conocimos a Ellie y su música y aquí estoy.

Mi nombre es Jennifer y tengo 22 años, vivo en Mallorca, sí, apartada del mundo. Mi twitter es www.twitter.com/thebitterend_
Soy una persona a la que le cuesta mucho recordar fechas y es que para mí no son importantes, podría decir que conocí a Ellie una tarde de domingo y que llovía y blablablá pero no tendría sentido, para mi empieza a contar desde donde nace ese sentimiento, esa ilusión.
No recuerdo ese día en concreto, pero sí de esa sensación en el cuerpo. Fue en 2010, gracias a un tweet de Kasey Smith, un cantante americano que me volvía loca por aquel entonces. Este, subió un enlace de la canción de Lights y me enamoré al instante. Al principio, la canción me pareció algo rara, diferente a lo que solía escuchar, pero me fue enamorando a cada segundo. No había llegado ni al estribillo y ya había clavado mis ojos en Ellie, se me había grabado en la mente esa imagen tan dulce de aquella chica rubia y parecía no tener intención de despegarse de mí.
Fue en ese momento cuando comenzó todo, me enamoré de su preciosa e inconfundible voz, de su forma de ser, de su mirada… de Elena Jane Goulding.
No sé como sucedió pero tuve un momento en “off” con su música, me encantaba su voz y había escuchado en youtube muchísimas de sus canciones pero me aferré a Lights y Starry Eyed y ahí me quedé, estancada en aquellas dos canciones. No fue hasta un año después que volví a investigar sobre su música (eso no quiere decir que dejara de escucharla, simplemente me quedé ahí, en standby). Fue algo muy raro porque ni yo misma me acuerdo, aunque no me sorprende, ya he dicho que tengo mala memoria.
Gracias a un archivo puedo decir que volví a aferrarme a su música en septiembre de 2011, indagué en youtube y me descargué varias canciones, entre ellas Guns and Horses.
Mi amor por Ellie Goulding era difícil de explicar, amaba su voz y la escuchaba a menudo pero la tenía algo apartada, sinceramente no sé el por qué ni como fue, era un amor en silencio.
En 2012 eso cambió, algo dentro de mí se arrepentía, había estado dos años escuchando su música de manera intermitente y una mañana desperté con la necesidad de oírla, de despertar con su hermosa voz, de hacer mis días más dulces con su música. Ahí fue cuando dejé de ser fan de Ellie Goulding y me convertí
en Goulddigger, o en una loca con la necesidad de saber más sobre aquella adorable chica que me había enamorado hacía un par de años.
Su música pasó a formar parte de mi vida cotidiana y sus canciones sonaban a todas horas en mi móvil, se apoderaron de mí literalmente. Su sonrisa había decidido habitar en mi cabeza y ahí sigue, dispuesta a hacerme sonreír a mí también.
Si tuviera que elegir una canción sería Lights ya que fue la que despertó ese sentimiento en mí pero no puedo negar que la que me hace suspirar desde el minuto 0 es Animal, ese sí que fue un amor a primera vista, para mí la canción más especial y en directo es inexplicable, perdí la noción del tiempo.

He tenido la suerte de ver a Ellie Goulding en concierto en dos ocasiones (Mallorca y Londres).
No soy una persona que crea en los sueños, siempre he pensado que los sueños solo sirven para mantenernos alejados de las cosas que nos preocupan o atormentan en la vida real, como una vía de escape y llegar a cumplirlos es algo muy extraño.
Desde que conocí a Ellie en 2010 fantaseé con ir a un concierto suyo, el hecho de verla en directo era algo que me hacía sonreír todo el tiempo pero que no veía posible. Ellie Goulding no era conocida en nuestro país y verla en el suyo era algo difícil ya que a nadie de mi entorno le gustaba, y quien me iba a decir que este año la vería dos veces.
La primera fue en el Mallorca Rocks, llevaba su nombre en la cabeza metido varios meses pensando que podría haber una posibilidad de que viniese a tocar, por pequeña que fuera. Me acuerdo de esa mañana, estaba durmiendo en casa de mi hermana Vanessa y miré Facebook, yo ya seguía la página del Mallorca Rocks desde hacía un año y la primera noticia que vi en el muro fue “Ellie Goulding-Mallorca Rocks-20 de agosto”, de un salto me levanté de la cama y fui a despertar a mi hermana llorando, era como cuando los niños se levantan en Navidad a abrir los regalos, mi hermana me miró en plan “qué ha pasado” y llegó a asustarse, cuando le dije que era por el concierto casi me mata. Después de unos meses de tira y afloja conmigo misma por ir, ya que no sabía de nadie que le gustara, conseguí mi sueño.

El concierto en Londres (Itunes festival) fue algo más complicado, cuestión de suerte supongo.
Todavía no me lo creo, y es que todo pasó tan rápido que no me ha dado tiempo de digerirlo.Una vez que cumples tu sueño pueden pasar dos cosas: o que lo dejes apartado al verlo visto convertido en recuerdo o que evolucione. Sí, suena un poco raro y alguno se habrá despistado con alguna serie de dibujos al escuchar “evolucionar”, o he sido la única? Jaja
No, en serio, en mi caso evolucionó, pasó de ser “verla en concierto” a “poder verla en su país” y un mes después estaba ahí, viendo como mi sueño se volvía a cumplir.
El siguiente paso será poder verla en persona y hacerme una foto con ella pero quizás es pedir demasiado, por ahora me conformo con haberla visto en directo.

En mi caso, como ya he dicho, mi sueño creció, mis ganas de poder verla en concierto de nuevo se han multiplicado, es una necesidad ya.
Es como el dicho “Es peor el remedio que la enfermedad”, si todavía no la has visto “sufres” porque ves que ese momento no llega pero… una vez que lo has hecho, lo haces (y el doble) porque no sabes cuándo será la próxima vez que la volverás a ver.

Ahora me queda fantasear con verla pronto, el lugar es lo de menos, lo único importante es poder disfrutar de su música en directo, de su presencia, y recordar que los sueños se pueden cumplir, aunque no creas en ellos.




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